Aún a falta de dos jornadas para finalizar la temporada en la Chinese Super League ya hay campeón. Guangzhou Evergrande Taobao tiene ya en el bolsillo su sexto título liguero. Sexto campeonato de forma consecutiva además.
El nivel competitivo del campeonato chino aumenta paso a paso. Cada vez hay más competencia en la lucha por los títulos nacionales. Pero, de momento, la liga nacional mantiene su dominador. Guangzhou Evergrande suma su sexta temporada consecutiva en primera y en las seis ha salido campeón.
Un paso atrás que marcó la leyenda en Guangzhou
A finales de 2009 se comunicaba la noticia. Un club de media tabla como era Guangzhou era descendido en los despachos a la Liga Jia. Corrupción, amaños y prácticas oscuras mandaban al club a la segunda división nacional. Lo que parecía el comienzo del fin no fue otra cosa que el inicio de una leyenda.
Una constructora potente de Cantón vio la puerta abierta. Evergrande se propuso implantar un modelo europeo en el gigante asiático. El fútbol como plataforma de expansión para una compañía local. Evergrande se hacía con la propiedad del club por una cifra cercana a los 14 millones de dolares. Y lo hizo a lo grande.
Aquella primera temporada los fichajes no llamaron la atención. Gabriel Melkan, Eduardo Delani, Charles Gbeke y un joven Gao Lin llegaban al club. El primero objetivo se cumplía a las primeras de cambio. Devolver el club a primera división se cumplió en la primera y única temporada en segunda. Comenzaba el proyecto de Evergrande de verdad. Llegaba la hora de saltar la banca.
Comienza la era Guangzhou Evergrande
Cambio total y absoluto de plantilla. Hasta 17 jugadores llegaron al club. Paulao, Cho won-hee, Darío Conca, Renato Cajá, Muriqui o Cléo. Mitos hoy del fútbol nacional como Zheng Zhi o Zhang Lipeng también aterrizaban en Guangzhou. 68 puntos, solo dos derrotas y una ventaja de 15 puntos final sobre Beijing Guoan.
Después de aquella liga de 2011 llegarían otras cinco contando esta lograda este pasado fin de semana. Llegaría también el triunfo continental en la AFC Champions League. Esta temporada el borrón ha estado, precisamente, en el máximo torneo de la AFC. Sin embargo aquella decepción queda en segundo plano. La sexta liga ya está en el bolsillo y aun queda otro premio. A finales de noviembre llegará la final de copa ante Jiangsu Suning. Primero contra segunda a doble vuelta para poner el broche a una temporada 2016 en la que China, definitivamente, ha puesto su fútbol de clubes en el planeta. La selección aún es otra historia.
Foto de portada: gzevergrandefc.com
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